Genialidad del blues campirano con cierta síncopa rocanrolera, David Bromberg, quien en su trayecto artístico durante cinco décadas y media, ha sido partícipe de múltiples experiencias melómanas junto con Bob Dylan, George Harrison, Jerry Garcia o el célebre guitarrista de blues seminal Reverend Gary Davis.
Considerado como co-inventor del newgrass, este creativo de las cuerdas comenzó a lanzar álbumes para la Columbia Records desde los años sesenta, suma 18 discos de estudio en solitario y ha colaborado en setenta producciones más, también es dueño de la tienda David Bromberg Fine Violins en Wilmington, Delaware, junto a su mujer Nancy Josephon, pero en ocasiones la carretera lo llama, como se puede apreciar en su más reciente disco: The Blues, The Whole Blues y Nothing but the Blues (2016).
Respecto a la cantante Acantha Lang, quien con tan solo dos sencillos, “Know Your Name” y “Eventually”, ha captado la atención en la escena afroamericana, al integrar el soul de Nueva Orleans y la agitación blusera del neoyorkino Harlem. Además, ha logrado presentarse en varios países de África, Europa, la Guayana Francesa, China y Rusia, también ha participado en diversas sesiones para canales digitales y otros programas líricos.
En otros rítmicos rincones, el sincopado trío rockero Groove Catchers, integrado por Bastien Weeger (saxofón), Antoine Guillemette (bajo) y Johan Barrer (batería), quienes fundan este proyecto dentro de la École Jazz à Tours en el 2009, en una fusión de jazz, música improvisada y neo-funk, la cual puedes escuchar en su álbum inaugural 53 (2015).
Guitarra, violín, dobro, mandolina y otras cuerdas que suenan en una mezcla de blues, country, jazz, folk, rock and roll o lo que el Maestro multiinstrumentista de Filadelfia, Pennsylvania, David Bromberg llama “kitchen sink”. Mientras que una de las apuestas en los ecos de Nueva Orleans, con un divino talento vocal, es la joven cantante de soul y rock blusero Acantha Lang. Por su parte, el rock del nu jazz galo interpretado por el trío Groove Catchers, le pone power a la síncopa de Tours.
Country blues a la Pennsylvania, soul de Nueva Orleans… y algo de jazz-rock galo
