Estimado lector un gusto encontrarnos de nueva cuenta en este espacio para la reflexión y critica de lo que acontece en el país, Así Fue que llegamos al mes patrio con la reunión entre dos desesperados por cambiar la imagen que tienen ante la opinión pública, Enrique Peña Nieto en su cuarto informe de gobierno y Donald Tump, quienes pensaron que este encuentro marcaría La Diferencia en el escrutinio ciudadano que los tiene noqueados el más perjudicado el inquilino de Los Pinos.

 

Caray, el boquiflojo de Trump y su discurso de odio no aguanta más, a pesar de las voces que dicen no te aferres, se ha referido de mala manera hacia los mexicanos que cruzan La Frontera, buscando el sueño americano, que créame después de la Ley 187, que generó odió y racismo, cabe la mención que nunca ha dejado de existir en el suelo norteamericano y hablo de los tres países que lo conforman, se puede decir que Palo Dado ni Dios lo Quita, para muchos ese sueño convierte en una pesadilla, pero esos los migrantes y luego residentes pueden inclinar la balanza en unas elecciones cerradas en Estados Unidos y en México.
 
El candidato no es un Inocente Pobre Amigo, no puede mantener el mismo discurso y sí, lo hizo “chamaqueo” a Peña, en términos de contienda política le hizo el trabajo sucio y No Vale la Pena porque Hillary Clinton cabalga rumbo a la Casa Blanca y no fue El Destino, sino el mismo discurso incendiario del republicano, lo único que busca Trump es bajarle al ridículo que está haciendo, pues se desploma en las encuestas y no le alcanzará para nada, en ese contexto visito el país, para reconciliarse y subir en las encuestas, una especie de No Discutamos, aunque parece demasiado Tarde.
 
La reunión se dio en un mal momento, pues para Peña la cosa no es mejor, en el cuarto informe de gobierno se enfrenta a la aceptación más baja, los aumentos a la gasolina, el gas y la electricidad, más el disparo del dólar nos tiene con los “pelos crispados”, aunque nos digan que Lentamente se va recuperando la economía, el descontento social no solo es de las clases bajas o medias, es generalizado, si le sumamos los escándalos de corrupción que no han podido aclarar, las disculpas y el Amor Eterno a sus incondicionales como: Alfredo Castillo, Aurelio Nuño y Osorio Chong, nos hace perder la esperanza, sin embargo ante la cascada de críticas por la visita del “idiota”, nadie salió a defender al “presiso” ¿tiraron la toalla? O simplemente No Vale la Pena.
 
Como estarán las cosas que de la boca de algunos priistas, esos que defendían lo indefendible, hombres de partido, he escuchado que Peña ha dejado de ser El Consentido, pero no podemos alegrarnos, es muy pronto para que se debilite la figura presidencial,  faltan dos años que serán tortuosos si el vacío de poder sigue creciendo y no se le pone un freno.
 
Nunca un presidente de la República, al menos en la historia reciente del país, había llegado con tan pésimo balance de su gestión a estas alturas del sexenio, por eso, nada podría decir Peña Nieto en un mensaje tradicional de logros y avances, no hay noticias de un futuro mejor para los mexicanos, las disculpas y el He Venido a Pedirte Perdón, aunque esté de moda, ya no es salida, tuvo la oportunidad de verse fuerte, pero simplemente la desperdició, el sexenio se termino el 31 de septiembre, no nos queda más que apechugar como siempre.
 
Entre palabras
 
En el año 2005 tuve la oportunidad de entrevistar al cantante Alberto Aguilera Valadez, luego de un concierto en el Auditorio Nacional, el espectáculo de Juan Gabriel duró más de cuatro horas y luego atendió a sus seguidores, abrazos fotografías, a eso de las cuatro de la mañana, sorprendido por haber soportado la espera platicamos por unos minutos, la lección fue de música, canto, letras del pueblo, pero sobre todo de humildad, eso es lo que lo hizo grande, no las lentejuelas.  
 
 
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