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El Estanquillo… las colecciones de un cronista

Por Glen Rodrigo Magaña.

El Centro Histórico de la Ciudad de México, en una de las esquinas de Isabel la Católica con Francisco I. Madero resguarda el edificio La Esmeralda, que fuera casa de una famosa joyería a finales de siglo XIX y que incluso, en la década de los noventa, albergara una “opulenta” discoteca. Actualmente, esta arquitectura tipo ecléctica, comparte con una tienda de discos el Museo del Estanquillo Colecciones Carlos Mosiváis, espacio que resguarda diversos objetos que fueran propiedad de este gran periodista, cronista, escritor y ferviente aficionado de piezas relacionadas con México, su gente y cotidianidad, las cuales se exhiben en sus tres salas.

Amigos, los invitamos a escuchar las cápsulas homoespacieras dentro del programa “La otra frecuencia” en Radiorama 1530 AM, que se transmite todos los miércoles de 20:00 a 21:00 horas. 

Detallar con textos el museo de uno de los principales y quizás de los últimos cronistas de México, no es cosa fácil. Atrevidas son las letras para describir a uno de los grandes personajes que analizaron desde el pueblo, hasta las esferas más altas del poder y la cultura de nuestro país. Patria que tal parece que borra de su memoria los famosos estanquillos de barrio, sitios que ofertan una gran variedad de artículos, desde abarrotes hasta jarcería…esos, los contados comercios donde encuentras de todo un poco y que sufren la constante amenaza de las grandes cadenas extranjeras. Como en casi todo… lo independiente escasea gracias a esta engañosa psique consumista que atenta contra nuestra identidad.

 

En lo que respecta al Museo del Estanquillo del Maestro Monsiváis, este ofrece de forma gratuita el embeleso por nuestra tierra, cultura a lo mexicano, anécdotas entre imágenes, documentos y sonidos históricos, profundas charlas artísticas con féminas que hipnotizan entre su conocimiento. Estilo y otros atractivos, coqueteos museográficos, pintorescas colecciones, delicias arquitectónicas, ecos con alma bohemia, reflejos de lo cotidiano y vistas coloniales en lo alto de un cuarto piso, son una breve reseña de estas colecciones del cronista.

 

Es importante destacar que el artículo fue elaborado con información y entrevista que realizamos a la Curadora y encargada del Departamento de Colecciones del Museo del Estanquillo, Ana Catalina Valenzuela, Maestra en Historia del Arte, especializándose en el Siglo XIX por la Universidad Nacional Autónoma de México.

 

La Esmeralda… desde joyas hasta entretenimiento nocturno

 

El edificio tipo ecléctico fue construido entre 1890 y 1892, como dijera el maestro Renato Leduc: “Tiempos en que era Dios omnipotente y el señor, don Porfirio Presidente”. La atractiva construcción estuvo a cargo de los arquitectos Eleuterio Méndez y J. Francisco Serrano para ser casa de la firma Esmeralda Hauser-Zivy y Compañía, inmueble inaugurado como joyería el 27 de noviembre de 1892. Es importante señalar que La Esmeralda fue una de las primeras construcciones de México realizadas con estructura de hierro y un reloj en su exterior.

 

En la época de los sesenta, se convirtió en oficinas gubernamentales. Años después, funcionó como sucursal bancaria y ya en la década de los noventa, congregó a las juventudes noctámbulas, al convertirse en la discoteca La Opulencia, así conocida por varios aficionados al galimatías. A inicios del nuevo milenio, comenzó un proceso de restauración del edificio, encargando al arquitecto Gabriel Mérigo Basurto el espacio museístico con apoyo del Gobierno del Distrito Federal, la Fundación del Centro Histórico, el Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Fideicomiso Público Museo del Estanquillo, para ser casa de las Colecciones Carlos Monsiváis.

 

Monsiváis… coleccionista de anécdotas mexicanas

 

Este emblemático analista cultural, político y social capitalino, participó activamente en el oficio periodístico en medios como Novedades, El Día, Excélsior, Uno Más Uno, La Jornada, El Universal, Proceso, la revista Siempre!, Eros, Personas, Nexos, Letras Libres, Este País, entre otros reconocidos diarios y revistas. Editor por vocación y apasionado escritor de varios géneros literarios como el aforismo, el cuento y la fábula -centrándose principalmente en la crónica y el ensayo- elaboró más de ochenta publicaciones. La primera de éstas fue “Días de guardar”, en 1970. Entre sus principales escritos se encuentran “Los rituales del caos” (1995), “Aires de familia. Cultura y sociedad en América Latina” (2000) y “Apocalipstick” (2009).

 

Amante de los gatos, llegó a tener más de veinte de estos animales; entre algunos nombres de sus mascotas proporcionados por Ana Catalina Valenzuela se encuentran: “Gatolomé de las bardas”, “El peligro para México” o “Miss Oginia”. Sus intereses también se inclinaron por el cine, así como la música para enamorados, sobre todo el bolero, en el cual era un experto. Además, era vegetariano y fue un fuerte opositor de la tauromaquia, nos comenta la curadora.

 

La fascinación por el arte popular, documentos históricos, litografías, pinturas, fotografías, dibujos, grabados y maquetas lo llevó a coleccionar más de 20 mil piezas, mismas que actualmente se exhiben en este variado Museo del Estanquillo, entre anécdotas de nuestro México de los siglos XIX y XX.

 

El museo… sus inicios y colecciones

 

El 23 de noviembre del 2006 se fundó el Museo del Estanquillo, bautizándolo así el mismo maestro Monsiváis. El proyecto fue apoyado por Rafael Barajas “El Fisgón”, Carlos Payán, miembros de la Asociación Cultural del Estanquillo y el Gobierno del Distrito Federal, con la finalidad de mostrar la vasta colección que el escritor y periodista poseía sobre diversas piezas de la vida política, social, cultural y costumbres de nuestro país con obras de personajes como: Teodoro Torres y Susana Navarro, Roberto Ruiz, Teresa Nava, Claudio Linatti, Constantino Escalante, José Guadalupe Posadas, Julio Ruelas, Leopoldo Méndez y el Taller de la Gráfica Popular, Miguel Covarrubias, Francisco Toledo, Eduardo del Río “Rius”, entre muchos otros.

 

La primera colección realizada fue En orden de aparición (2006), el mismo día de la inauguración del museo, donde mostraba 500 piezas de diferente índole, desde maquetas elaboradas por la Señora Teresa Nava; miniaturas de hueso, hechas magistralmente por Roberto Ruiz; cajas y pequeñas esculturas en plomo ejecutadas por el matrimonio Torres, integrando también caricaturas, historietas, grabados del Taller de la Gráfica Popular, fotografías y pintura.

 

En el año 2007, exposiciones como El amor amoroso de una pareja dispar, conformado por 54 piezas, mostraban una visión de Frida Kahlo y Diego Rivera bajo la interpretación de varios amigos y vecinos que convivieron con esta pareja de pintores. Otra colección significativa en este año fue De San Garabato al Callejón del Cuajo, en homenaje a dos grandes ilustradores: Gabriel Vargas con su Familia Burrón, así como Eduardo del Río “Rius” y sus cartones de Los Super Machos y Los Agachados.

 

La exposición Te pareces tanto a mí, en 2008, fue todo un éxito entre caricaturas y fotografías miniatura de personalidades del siglo XIX y XX. En 2009, Diseccionando fantasías, mostró el lado creativo del cineasta jalisciense Guillermo del Toro. Para el 2010, las celebraciones entorno al Bicentenario de la Independencia de México, así como el Centenario de la Revolución Mexicana contó con dos exhibiciones: Los grandes festejos del Centenario, ubicando la muestra en los inicios del siglo XIX, cuando Porfirio Díaz realizaba toda una labor mercadotécnica para convencer al pueblo sobre su dictadura; la segunda colección fue México a través de las causas, con más de 800 piezas que incluyó documentos inéditos de la etapa revolucionaria, como el acta de ingreso a la masonería de Francisco I. Madero, los negativos originales de fotografías de Emiliano Zapata, entre otras rarezas de este periodo.

 

Dentro del desarrollo del Museo del Estanquillo, en 2011 se inauguró la muestra Dos miradas al Fascismo: Diego Rivera y Carlos Monsivais, que ilustra el mundo del fascismo y algunos movimientos de derecha radical que aparecieron en México. En 2012 se realizó la exhibición “5 de Mayo” Estampas y Caricaturas de la Intervención Francesa, integrada por 325 piezas que documentan el movimiento armado desde diferentes aristas, tanto en periódicos galos como nacionales. En 2013, se le rindió homenaje a la música romántica y al maestro Carlos Monsiváis que lamentablemente falleció el 19 de junio de 2010, con la exposición Amor Perdido. El bolero de Monsiváis. Imágenes de Armando Herrera, el fotógrafo de las estrellas. Además, otras colecciones que se presentaron en ese año fueron: José Guadalupe Posadas: Crónica de un cronista y Miguel Covarrubias. Imagen de un mexicano universal.

 

El presente… entre música con imágenes y los estanquillos

 

Las cinco plantas que forman el museo se distribuyen en tres salas; las dos primeras ubicadas en el primer y segundo piso que albergan la exposición principal. En el tercer piso encontrarás la segunda colección, así como la sala de lectura inaugurada en junio de 2011 que cuenta con cerca de 2000 publicaciones literarias divididas en tres áreas: Bellas Artes, con libros sobre pintura, fotografía, cine, arquitectura, urbanismo, caricaturas y arte en general; Literatura, con libros de poesía, novelas, ensayos e incluso obras de Carlos Monsiváis; en la última área, encontrarás textos sobre la Historia de México organizada por épocas. En lo alto del edificio La Esmeralda, el bello panorama hacia las calles coloniales del Centro Histórico con el que cuenta la terraza del Estanquillo, parece un retrato virreinal.

 

Las explosiones que encontrarás activas en el museo son: Partituras mexicanas ilustradas, un tesoro inaudito, que por cierto podrás admirar hasta el próximo 5 de mayo. El recorrido cuenta con partituras y portadas de grandes obras melódicas de emblemáticos compositores, entre ellos, Miguel Lerdo de Tejada, Manuel M. Ponce, Juventino Rosas, Agustín Lara, María Grever y Gonzalo Curiel, por citar algunos. Además, las ilustraciones de las portadas fueron realizadas por artistas como José María Villasana, José Guadalupe Posada, Andrés Audiffred y Ernesto García Cabral. Otra colección, pero ubicada en el tercer piso, es la de Tiendas, comercios y estanquillos en las colecciones Carlos Monsiváis, curada por Catalina Valenzuela, quien nos comenta que la idea de esta muestra inició por la plática con un taxista que le preguntó si el Museo exhibía piezas sobre estanquillos, mercados o algo relacionado, de ahí el recrear este ambiente de los comercios mexicanos.

 

Próximamente…

 

Este 28 de mayo inauguraran Así semos, Andrés Audiffred y su México. Caricatura costumbrista del Siglo XX entre cartones de Andrés, el “Chango” Cabral, así como caricaturas en cera de Luis Hidalgo. Para el 25 de junio se realizará una retrospectiva en Homenaje a “Rius”, que está por cumplir 80 años.

 

El Museo del Estanquillo Colecciones Carlos Monsiváis se encuentra en Isabel la Católica # 26, Col. Centro, Delegación Cuauhtémoc, Ciudad de México. Teléfono: 5521-3052 Correo: serviciosalpublico@museodelestanquillo.com

 

Estimados lectores, les compartimos los homoespacieros enlaces y redes sociales de este recinto cultural del edificio La Esmeralda:

 

https://www.facebook.com/museodel.estanquillo.9

@m_estanquillo

 

Edificio del Museo del Estanquillo. 

Kiosko: Museo del Estanquillo. 

Armando Herrera a través de Tongolele. 

 

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