top of page

  Por  Luis Carlos Rodríguez González

Periodista y Editor General del diario digital The Éxodo

.

Elecciones: del carro completo a las narco-campañas

Tal Cual

 

En poco más de 20 años el país, en materia electoral, se ha pasado de la caídas del sistema 1988 instrumentada por  Manuel Bartlett al “haiga sido como haiga sido” de la mancuerna de Felipe Calderón y el ex presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, pasando por el  “carro completo” del PRI, la  abierta compra de votos o la operación “tamal” a formas diferentes de hacer campaña con el uso de nuevas tecnologías, pero también con innovadores sistemas de mapachería comicial.

En las elecciones de 1994, cuando me iniciaba en el periodismo, cubrí el proceso electoral federal en La Montaña de Guerrero. En esas comunidades, las más pobres del país,  los caciques recogían las credenciales del IFE a  todos los habitantes.  A los reporteros no nos permitían ni entrar a esos pueblos y de lejos veíamos como llegaban los camiones de Diconsa y Sedesol a entregar uno a uno a los pobladores sacos de harina a cambio del voto.

 

También era común ver a los candidatos y líderes partidistas, sobre todo en zonas rurales y colonias populares, convocar a sus militantes, vecinos o subordinados a desayunar  en un determinado domicilio antes de ir a votar y con ello asegurar la fidelidad de los votantes. A ello se le llamaba “acarreo” y  garantizaba casillas “zapato”, es decir todos los votos por un partido.

 

Urnas “embarazadas” por la operación “tamal” o el “ratón loco” o “carrusel”  son términos de la “mapachería” o trampas electorales casi descontinuadas o en algunos casos modernizados por partidos y candidatos en estos tiempos,  como fue el caso del PVEM en las elecciones de julio del 2015 en Chiapas.

 

El PVEM dio catedra del realismo mágico-electoral del país: robó la identidad de 16 mil electores chiapanecos, humildes que nunca han salido de sus comunidades o del estado, que no aparecieron en la Lista Nominal sino que entraron “mágicamente” en el padrón de quienes radicaban en naciones como Inglaterra, Francia, Uganda o Vietnam para dar el triunfo a “diputados migrantes” ecologistas.

 

Las redes sociales también han sido campo de batalla y escenario de las triquiñuelas de los candidatos y líderes del PVEM. El ex entrenador de la Selección Nacional de Futbol, Miguel “El Piojo” Herrera y artistas como Andrea Legarreta, en plena jornada electoral enviaron mensajes con el hashtag #VerdeSiCumple, #BecasParaNoDejarLaEscuela y #VamosVerde. Al Final todo quedo en la impunidad.

 

En la actuales campañas de cara a las elecciones en 14 entidades del país, las redes sociales, las narco-acusaciones, la “guerra sucia”, la intercepción de llamadas para evidenciar que un candidato a gobernador es regañado por su presunta amante, son parte de la nueva realidad en la jornada del próximo 5 de junio y en donde tienen derecho a voto 37.3 millones de mexicanos.

 

Un amigo periodista que radica en Tamaulipas me comentó hace unos días que en ese estado no hay una contienda entre los candidatos del PRI, PAN, PRD o independientes por la gubernatura. “Es una competencia entre dos cárteles en pugna para ver quien detenta el poder político”. Esa es parte de la realidad de las campañas electorales en México. Tal Cual.

 

www.theexodo.com

 

 

 

 

 

 

 

bottom of page