• Instituciones bancarias tuvieron más de 28,000 reclamaciones

• Cabildean empresarios en  el Congreso propuestas económicas

• Intensa fase de negociaciones en rubros económico y fiscal

 

Desde hace no menos de un lustro en nuestro país hemos escuchado de manera recurrente de un delito que pareciera ser un asunto menor, pero no lo es, porque si bien por el momento sólo afecta a un  sector de la población hemos visto como ha crecido de manera exponencial.

 

Nos referimos al robo de identidad entre los usuarios de la banca comercial, delito que tan sólo en la primera mitad de este 2015 tuvo un incremento que implicó un monto de reclamación de 118 millones de pesos.

 

En este año, de cada 100 reclamaciones imputables a un fraude, dos corresponden a un posible robo de identidad, de acuerdo con cifras proporcionadas por el propio presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Mario Di Costanzo.

 

Este delito considera la apertura de cuentas no solicitadas ni autorizadas por el usuario; créditos no reconocidos en el historial crediticio, créditos otorgados sin ser solicitados o autorizados por el cliente e inconformidad con cobros de productos o servicios.

 

Por su parte, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), que preside Jaime González Aguadé, ha revelado que en la primera mitad del año, la banca tuvo dos millones 451 mil 370 reclamaciones, de las cuales un millón 683 mil fueron imputables a un fraude y de esas, 28 mil 258 fueron de robo de identidad, cifra 40 por ciento mayor a la reportada en la primera mitad de 2014.

 

Con base en estas cifras, la propia Condusef desarrolló  el Índice de Robo de identidad, el cual se ubicó en un nivel de 1.7 por ciento y muestra un incremento en los últimos años, pues en el primer semestre de 2011 se colocó en 0.4 por ciento y para la primera mitad del año pasado se ubicó en 1.5 por ciento.

 

Estos reportes de la banca implicaron que en 2015, el monto reclamado por los usuarios ascendió a 118 millones de pesos tan sólo en el robo de identidad, 19 por ciento más que lo reclamado en 2014.

 

Si bien los ataques por medios electrónicos en contra de clientes de la banca son cada vez más sofisticados, también se detectan casos de identificaciones falsas del Instituto Nacional Electoral (INE) y pasaportes, con los cuales los delincuentes solicitan créditos bancarios. Así que el asunto ya debería ser tratado como un tema de seguridad nacional por todas las implicaciones que conlleva.

 

El cabildeo empresarial

 

Como cada año, pero particularmente en éste que es crucial para tratar de oxigenarse y despegar  o, de plano, morirse en el intento, el sector empresarial del país se prepara para cabildear con los diputados y senadores para que sus propuestas se incluyan en el presupuesto del 2016, sobre las que se refieren a los rubros económico y fiscal.

 

Para tal efecto, el Consejo Coordinador Empresarial, que encabeza Gerardo Gutiérrez Candiani, ya inició una intensa fase de análisis, negociaciones, construcción de acuerdos y procesos involucrados para lograr una Ley de Ingresos adecuada.

 

El sector privado tiene la convicción de que hay margen para mejorar e incrementar de manera importante el paquete de incentivos propuestos en el proceso de aprobación del paquete económico en el Congreso.

 

Es por ello que la cúpula empresarial promoverá con vigor algunas medidas fundamentales que no se incluyeron en el paquete, como aumentar al 100 por ciento la deducibilidad de las prestaciones sociales, que en el marco propuesto quedarían como no deducibles a 47 o 53 por ciento.

 

Según los empresarios, el marco impositivo vigente en materia de prestaciones ha elevado el costo laboral hasta en ocho por ciento, lo que representa grandes dificultades para mantener o incrementar las plantillas laborales y nóminas.

 

Para la iniciativa privada, éste ha sido uno de los elementos de la reforma de 2013 que más han afectado a las empresas y sus trabajadores, por lo que considera el asunto crucial, ante el imperativo de generar más y mejores empleos dentro de la formalidad.

 

Eso sí, califican de oportuna y adecuada la medida que establece la recuperación de la deducción inmediata de inversiones, aunque esté acotada a sectores y empresas con ingresos de hasta 50 millones de pesos anuales.

 

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