En 1987, dentro de Washington, DC, en los Estados Unidos, Ann Rabson, Gaye Adegbalola y Earlene Lewis fundan el tío Saffire - The Uppity Blues Mujeres, tres años después Lewis cede su lugar a Andra Faye y su carrera musical, inicia formalmente con su álbum debut homónimo en aquel 1990.
Piano, guitarras, mandolina, violín, bajo y adornos vocales al puro ritmo de blues, letras con una profunda reflexión social, amores rotos, tradición, seducción y otros ecos por la libertad femenina, suenan en sus diez discos, donde se escuchan verdaderas joyas como “Unlove you”, “Middle Aged Blues Boogie”, “Hungry Woman's Blues” o “Big Ovaries, Baby”. Después del lanzamiento de su último álbum Havin 'The Last Word (2009), la banda se desintegra y para el 30 de enero de 2013 en Fredericksburg, Virginia, Ann Rabson, pero Andra Faye continúa interpretando lo éxitos de este gran trío en Indianapolis, Indiana.
Respecto al mestizaje sincopado con folk espiritual de Alysha Brilla, resultado de la herencia ideológica, religiosa, así como melómana de su madre europeo-canadiense y su padre indo-tanzano. Productora y cantautora canadiense, Brilla cuenta con cuatro discos de estudio: En mi cabeza (2013), Womyn (2014), Humano (2016) y Enraizado (2017); así como alternar su creatividad lírica con presentaciones en festivales y realización de talleres de educación artística en las escuelas, en los que promueve la diversidad en la música y la autoexpresión a través de las artes.
En otros sonidos, la joven londinense Joy Crookes es toda una enamorada de los géneros afroamericanos, que entrelaza con los beats electrónicos europeos, otorgando un fresco encuentro rítmico. En el 2016 lanzó su primer sencillo “New Manhattan”, pero fue hasta hace unos meses que da a conocer su EP inaugural Influence.
En la capital de los Estados Unidos, el trio blusero Saffire - The Uppity Blues Women, con sus más de treinta años de carrera, interpretan el sentimiento femenino profundo, atrevido y emocional desde las raíces de la música negra hasta que la última integrante viva. Mientras que la cantante canadiense Alysha Brilla, inspirada por la música de Amy Winehouse, Bob Marley, Buffy Sainte-Marie y hasta Selena Quintanilla, desarrolla una especie de jazz folclórico con ritmos africanos, indios y de otras partes del mundo. Por su parte, la joven cantautora inglesa Joy Crookes, con sus 19 años de edad, ya es toda una revelación en la escena del R&B.
Feministas del blues, mestizaje del jazz-folk espiritual… y una joven con R&B electrónico
