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¿Quién va a detener a Moreno Valle?, pregunté hace dos años al entonces diputado federal priista Javier López Zavala. Su respuesta inmediata fue: “¡Yo!” Pero…

Columnista del periódico La Crónica de Hoy. Director del portal Entresemana.
Correo: sanchezlimon@gmail.com
Twitter: @msanchezlimon 

Cuestión de casualidades, el pasado viernes 15, mientras Rafael Moreno Valle Rosas festejaba sus cinco años en el poder supremo como gobernador de Puebla, López Zavala festejaba su cumpleaños número 47 con una barbacoa en un salón de la colonia San Manuel, en la capital del estado.

 

Según las crónicas periodísticas, por cierto no desplegadas en los medios como en aquellos días de gloria del priismo poblano, a la celebración acudió medio millar de amigos y simpatizantes de López Zavala cuyo mensaje se centró en criticar al gobierno de Moreno Valle Rosas. ¡Elemental!

 

Que se sepa, el ex candidato al gobierno poblano ni alguno de sus seguidores habló de la sucesión, aunque el ágape tuvo ese tinte, como el hecho de que el diputado federal priista Alejandro Armenta Mier, ensalzara a López Zavala como un político de gran trayectoria.

 

Aunque formalmente no hubo un pronunciamiento sucesorio, en noviembre del año pasado, vísperas de celebrarse la reunión del Consejo Político del PRI-Puebla, López Zavala manifestó su interés en volver a contener por la gubernatura poblana. Fue la confirmación de lo que me adelantó hace dos años.

 

Hoy, los aspirantes priistas a la mini gubernatura de dos años esperan se concrete el anuncio hecho en diciembre del año pasado, de que será mediante el método de Convención de Delegados como el PRI poblano elegirá a su candidato al gobierno de la entidad, que al final de cuentas se encuadrará con un pronunciamiento de unidad, tal cual ha ocurrido en la mayoría de los 12 estados en los que habrá elección de gobernador.

 

Esa mecánica, bajo la presidencia de Manlio Fabio Beltrones, posibilitó que el PRI pasara la aduana de Colima este domingo, donde José Ignacio Peralta Sánchez ganó en la elección extraordinaria de gobernador al senador panista con licencia Jorge Luis Preciado Rodríguez.

 

Pero, Puebla es una entidad en la que la maquinaria aliancista contra el PRI tiene otras características que requieren de acuerdos más allá de las figuras tradicionales pero con sustento en la estructura que ha tenido éxito en el estado en tiempos no lejanos y que, después del fracaso de 2010, debe haber entendido la lección. Y hablamos del mismo equipo del que López Zavala salió con la convicción de que sería gobernador pero se enfrentó a una estrategia en la que el Partido Nueva Alianza fue parte elemental del triunfo de Moreno Valle Rosas.

 

Hoy, no está el poder de la maestra Elba Esther Gordillo Morales, pero algo queda y…

 

A Rafael Moreno Valle Rosas debe reconocérsele que en cinco años de gobierno ha desplegado una estrategia que lo instala como alumno destacado de la escuela de Nicolás Maquiavelo para apisonar su ruta rumbo a la Presidencia de la República.

 

En efecto, con ese objetivo, desde el mismo momento en que rindió protesta como gobernador del estado de Puebla el 1 de febrero de 2011 ha construido en su entorno y plataforma personal un círculo de incondicionales que pasa por el actual presidente municipal de la capital poblana, José Antonio Gali Fayad, y el hijo de éste, Antonio Gali López, cuya carrera política local creció de forma tal que junto con su padre está en la posibilidad de ser candidato de la alianza PAN-PRD a la gubernatura de dos años que se disputará en las urnas el próximo cinco de junio.

 

¿Quién para frenar esa carrera de Moreno Valle y enfrentar a cualquiera de los Gali que, seguramente, será el candidato de la alianza PAN-PRD a la gubernatura en el periodo 2017-2019? ¿Enrique Doger? ¿La senadora Blanca Alcalá?

 

Bueno, en la foto que circuló desde la tarde del viernes último, luego del acto en el que Moreno Valle rindió su quinto informe de gobierno, aparece la senadora Blanca Alcalá, pero igual el delegado de la Sagarpa en Puebla, Alberto Jiménez Merino y hasta el secretario de Gobierno, el ex gobernador de Oaxaca, Diódoro Carrasco Altamirano.

 

Por alguna razón que de sobra es conocida en estos asuntos de los juegos del poder y del querer, la referencia periodística fue que todo el tiempo Rosario Robles estuvo acompañada por la senadora Alcalá Ruiz. ¿Y? No estuvo Doger en esa primera plana, pero casualmente se soslayó y restó importancia a la presencia de Jiménez Merino. ¿Será porque lo vinculan estrechamente al ex gobernador Mario Marín?

 

Será el sereno, pero no debe perderse de vista a Jiménez Merino, a quien el mismo fuego amigo le ha pretendido restar méritos propios. Y uno de ellos estriba en el hecho de que no ha negado ninguna relación de amistad y si usted quiere de tutela política; además, la máxima refiere que golpe que no tira, fortalece.

 

Moreno Valle Rosas hizo trizas a sus enemigos políticos, los despedazó y desactivo en cinco años con esa estrategia desplegada en alianzas, en éstas que contó con prohombres lo mismo del priismo que de la oposición perredista que no figura como una fuerza fundamental en Puebla pero que ha recibido beneficios en la estructura en el poder.

 

¿Será Jiménez Merino la figura que enfrente al morenovallismo y lo saque del Palacio de Gobierno de Puebla?

 

Por lo menos, el delegado de la Sagarpa alzó la mano el pasado viernes y sostuvo que sigue firme en obtener la candidatura del PRI al gobierno poblano.

 

Tres puntos destacan en la entrevista radiofónica concedida a Iván Mercado en el noticiero de Radio Oro. Primero, el CEN del PRI no ha definido, hasta hoy, quién será el candidato; acatará la decisión que tome la dirigencia nacional encabezada por Manlio Fabio Beltrones y, punto fundamental, la semana pasada platicó con la senadora Blanca Alcalá, en la que, dijo, mutuamente reiteramos respeto y sumatoria en caso de que fuera ella o un servidor”.

 

¿Piedras en el camino de Jiménez Merino? ¿Para qué y de parte de quién? Colima ya dio una lección con un candidato al que calificaron dentro del mismo CEN del PRI, en su momento, como desconocido y falto de tablas. Digo.

 

LUNES. Sorpresas en Oaxaca y Sinaloa, sin duda. Tamaulipas tiene una definición que pasa por el expediente de Marco Antonio Bernal y su experiencia. Conste.

 

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Puebla, Moreno Valle, Jiménez Merino…

 

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