La dulce armonía de la cantante estadounidense Norah Jones, provoca ese plácido estado de sosiego o literalmente: “Música… para calmar a las bestias”, esas que se desatan por dentro y que con la lírica adecuada son subyugadas. Mucho que mencionar de esta afamada pianista nacida en un pequeño barrio de Brooklyn, donde entre los vinilos de Bill Evans y Billie Holiday, su oído fue adquiriendo esa conocida adicción por el jazz. A los siete años, ya cantaba algo de gospel en el coro de la iglesia, mientras tomaba clases de piano y saxofón, pero fue a mediados de los ochenta, cuando en la texana Dallas, se adentra en los ritmos afroamericanos en el Booker T. Washington High School for the Performing and Visual Arts.
La “Maddi” Jones, ha colaborado con artistas como Mike Patton, Foo Fighters, The Peter Malick Group o Herbie Hancock. Cuenta hasta el momento con los álbumes: Come Away with Me (2002), Feels Like Home (2004), Not Too Late (2007), The Fall (2009), Little Broken Hearts (2012) y Day Breaks (2016). Algunos de sus principales éxitos son “Come away with me”, “Sunrise”, “Carry on”, “Don't Know Why” o “Happy Pills” y es uno de los talentos consentidos de Blue Note Records.
En otros rincones líricos, el dorado encanto de la trompetista Bria Skonberg es descrito atinadamente por el The Wall Street Journal como “uno de los músicos más versátiles e imponentes de su generación", sus composiciones viajan desde los ocultos sonidos de Nueva Orleans, hasta el colorido sentimiento latinoamericano, temas como “Que será, será”, el goce arrabalero de “So is the day”, un afinado “Little Girl” o la fiesta de “Meet me in your dreams” son algunos sonoros ejemplos.
Respecto al melódico regodeo de la británica Sara Mitra… la mezcla del folk irlandés, jazz inglés y R&B estadounidense, es la orgía de ritmos que censuran lo prohibido, donde el April Song (2002) brinda el despertar para esta cantante y en los ecos callejeros Losing You (2015), donde la expresión del cuerpo, mucho sudor y notas psicodélicas del ritmo roto, nos duren en el misterio de una noche… y nada más.
Galardonada con nueve premios Grammy, más de 50 millones de discos vendidos y seis álbumes lanzados, la divina cantante, compositora, pianista y actriz neoyorquina Norah Jones, nos seduce con su sincopado talento. Mientras que en la canadiense Columbia Británica, la rubia trompetista, cantante y compositora Bria Skonberg, es todo un deleite jazzístico con toque latino. Por su parte, la cantante, compositora y directora de orquesta británica Sara Mitra, resulta ser un sugestivo delirio del ritmo roto psicodélico.
Tres ensueños del jazz